La lección viral de una madre sobre los estereotipos en los juguetes
La usuaria de Twitter, @Yoloxyosoy, se ha convertido en una de las grandes protagonitas de las redes sociales. La culpa la tiene una publicación que compartió tras las navidades, en la que contaba una historia que a muchos os resultará familiar, especialmente si tenéis hijos.
Resulta que su hija le pidió un regalo para las navidades, una pista de coches. Hasta ahí todo normal… pero le llamó la atención el comentario al respecto de un niño. Y es que su hija fue señalada por desear una pista de coches porque “son para niños”.
“Mi hija quería una pista y un niño le dijo q no podía pedirla porque las pistas son para niños 🙄 Sentí feo por él por q tan chiquito tenga esos estereotipos de género. Ojalá venga a la casa a jugar para q vea que LOS JUGUETES NO SON PARA NIÑO O NIÑA, SON PARA JUGAR Y DIVERTIRSE”, escribió @Yoloxyosoy en la red social en un tuit que no tardó en hacerse viral.
En efecto, el mensaje fue aplaudido y compartido por miles de usuarios; en el momento de escribir estas líneas, cuenta De hecho, ya tiene caso 30 mil “me gusta” y ha sido compartido en casi 6 mil ocasiones.
Mi hija quería una pista y un niño le dijo q no podía pedirla porque las pistas son para niños 🙄 Sentí feo por él por q tan chiquito tenga esos estereotipos de género.
Ojalá venga a la casa a jugar para q vea que LOS JUGUETES NO SON PARA NIÑO O NIÑA, SON PARA JUGAR Y DIVERTIRSE. pic.twitter.com/tmpkNKUH1t— Yolox (@Yoloxyosoy) January 8, 2019
Además, el relato inspiró a muchas personas a aportar sus propias historias.
A mí me gusta coleccionarloS!!!!
Y soy muy femenina 😘 pic.twitter.com/tZ7f63pQJq— Vivi Flores (@myn_af) 8 de enero de 2019
Mi sobrina pidió en Navidad un balón de fútbol. Y recorrí muchas tiendas buscando el mejor. Que disfrute es la consigna. Que otros se rompan la vida creyendo si está bien o mal. pic.twitter.com/hsZbD1Kqxg
— Joel Figueroa (@mathariel) 9 de enero de 2019
Mi sobrino quería una cocinita y todos le decían lo mismo que eso era para niñas y su mamá se la compró. Cada quien decide y sabe cuáles son los gustos no los demás.
— Angel V vas. #Festival (@AngelVvas1) 9 de enero de 2019
Mi hijo también pidió sartenes,ollas, platos y copas, yo todo le compraba y jugábamos a restaurante y cuando era hora de dormir le decía es hora de cerrar y hacia vales de cortesía por un copa de vino a los osos(clientes) por qué ya teníamos que cerrar.
— Elizabeth ortiz (@eortiz11) 9 de enero de 2019
¡Genial 👏🏼👏🏼! Mi hija en el preescolar (ahora tiene 16) llevaba feliz su mochila y lonchera de “cars” mientras todas las niñas llevaban de princesas.
— Paula (@paulasiza_) 8 de enero de 2019
Mi niña ha tenido etapas. Jugamos decenas de horas con Avenger; a veces soy el cliente en su salón de belleza y no me importa ir a trabajar con uñas pintadas; a veces contamos mil historias con Barbie y hacemos carreteras en el parque.
— Manuel moreno (@Moreno_manuel) 8 de enero de 2019
¿Qué os parece a vosotros?